domingo, 15 de mayo de 2011

¡Impacto!


La historia se repite, como era de esperar por otra parte, y, nuevamente, me toca padecer una semana de retroceso en esta batalla contra el peso (+0,6 kg, como queda reflejado en la página de las Pesadas). En mi defensa diré que sabía perfectamente que esto iba a pasar y ya había asumido mi derrota mucho antes de la Pesada Oficial de esta mañana. Sólo rezaba para que no hubiese recuperado todo lo que perdí hace una semana.

¿Qué me ha llevado a volver fracasar en esta etapa? Pues, ooooooootra vez lo mismo, compromisos adquiridos que lastran el resultado global y cuyo resultado nefasto sólo me veo capaz de evitar apretando muchísimo el acelerador por otro lado. No he podido hacerlo y mi cuerpo a reaccionado como esperaba, ganando peso y volumen.

Ahora me vuelvo a poner las pilas (si unas estupendas galletas de chocolate que ha hecho mi esposa me lo permiten) y a seguir caminando por el camino del descenso del peso, porque llega en poco tiempo la primera de las fechas que me puso de tope al inicio de todo este proceso. El día 1 de julio tengo que pesar 108 kg o menos.

¡Ánimo, ánimo!

Pero volviendo al tema de "compensar" excesos apretando en las otras comidas tengo que decir que es algo que estoy tratando de evitar por todos los medios. Cuando me paso en alguna ocasión lo que hago es ceñirme a rajatabla a la dieta a continuación, sin reducir mi ingesta de alimentos. A fin de cuentas, uno de mis objetivos secundarios es no pasar hambre sino reeducar mi manera de comer, por lo que no es una opción viable "comer menos" de lo que me toca sino intentar no excederme demasiado en esas comidas que se salen de lo marcado.

¿Es importante lo de mantener la cantidad de comida día tras día aunque haya excesos en ocasiones? Sí, sin ninguna duda. Entrar en el juego de "como he comido mucho voy a cenar menos de lo normal" es un mal camino porque tiende a crear desequilibrios alimenticios y una falsa sensación de control y "equilibrio" que no tiene nada que ver con la realidad. Por ejemplo, si en la comida como dos postres y mucho pan ¿se compensa de algún modo si en vez de cenar mi ración de jamón serrano, lomo, jamón york y queso curado crudo sólo "tomo" una lonchita de jamón york? No, de ninguna manera. Caloricamente el golpetazo ya me lo he llevado en el computo diario pero, encima, si ceno poco "para compensar" voy a llegar a la hora del desayuno con un hambre salvaje y probablemente o me atiborre o ya esté con hambre todo el día siguiente.

No, el mejor modo de compensar los abusos es integrándolos en la dieta cotidiana y convirtiendo ese "desliz" en algo puntual que no altera el resto del sistema.

Así que cuando digo que esta semana voy a "compensar" me refiero a que voy a ceñirme mejor al sistema que estoy siguiendo evitando las salidas de tono, trataré de hacer algo más de ejercicio cotidiano y beberé más agua y menos Coca Cola Light.

Los resultados: en mi próxima Pesada del domingo que viene. Y espero que sean buenos.

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