sábado, 17 de diciembre de 2011

Bastante mal, al final.

Hay que ver lo mal que ha ido, al final, este año en el tema de la dieta. Todos mis objetivos han saltado por los aires y me encuentro con que hemos llegado a las Navidades y he fracasado estrepitosamente pese a los esfuerzos que he dedicado al tema.

Por un lado, la verdad, no me sorprende lo más mínimo que me encuentre así. Es una cuestión de conocerme a mi mismo.

Así que, ahora toca enfrentarme al año 2012 con nuevos objetivos y energía renovada.

A ver que se puede hacer.